Crea los embudos de conversión para tu proceso comercial

Es fundamental establecer metas de ventas claras y alcanzables para el proyecto inmobiliario. Estas metas proporcionarán una referencia clara sobre lo que se espera lograr y servirán como punto de partida para la creación de los embudos de conversión. Al tener claridad en las metas, se podrá orientar todo el proceso hacia el logro de esos objetivos específicos.

• Crear las etapas del embudo: Una vez definidas las metas de ventas, se deben establecer las diferentes etapas por las que los usuarios pasarán en el proceso comercial. Estas etapas pueden variar según las necesidades y la estrategia de cada compañía, pero algunos ejemplos comunes pueden ser: "Interesado", "Agendamientos", "Visitas" y "Compras". Cada etapa representa un hito en el recorrido del cliente potencial hacia la conversión.
  
  
• Establecer metas de conversión: Es recomendable fijar una meta de conversión para cada una de las etapas del embudo. Si no se cuenta con datos históricos, se pueden crear suposiciones basadas en la experiencia o en investigaciones de mercado. Si ya existen métricas disponibles, se pueden utilizar como referencia para establecer metas más precisas y realistas. Estas metas permitirán medir el rendimiento del embudo y realizar ajustes en caso necesario.
  
  
• Considerar canales y tasas de conversión: Es importante reconocer que cada canal de adquisición de clientes puede tener tasas de conversión, costos y volúmenes diferentes. Por ejemplo, la conversión de un cliente proveniente de Facebook puede diferir de la de un cliente que llega a través de la búsqueda orgánica en Google o por un canal de referidos. Es necesario tener en cuenta estas diferencias y establecer embudos de conversión específicos para cada canal, adaptando las estrategias y las metas de conversión según las particularidades de cada uno.
  
  
• Enfoque del embudo: Una vez comprendidas las tasas de conversión de cada canal, se puede establecer el enfoque del embudo, ya sea de abajo hacia arriba (determinando la cantidad de leads necesarios para alcanzar las metas de ventas) o de arriba hacia abajo (estableciendo la cantidad de ventas que se podrían lograr con una determinada cantidad de leads). Este enfoque permite planificar y optimizar los esfuerzos de marketing y ventas de manera más efectiva.
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Lo más relevante al crear embudos de conversión es la capacidad de medir y analizar con frecuencia las atribuciones de ventas y las tasas de conversión. Esto permite identificar qué estrategias y canales están generando mejores resultados, así como realizar ajustes y mejoras continuas para optimizar el rendimiento del embudo y maximizar las conversiones en el proyecto inmobiliario.

Es importante tener en cuenta que si bien es posible analizar el embudo de conversión como un ciclo de una única línea vertical que inicia y termina en un proceso, también es posible analizarlo cómo un círculo donde cada día se van puliendo los procesos y los clientes que efectivamente pasan por esta etapa se vuelven embajadores de la marca o el proyecto y pueden incentivar más ventas.